Descripción
Excelente villa T4, en una parcela de poco más de 3000m², junto con un anexo T1 aislado, esta villa se inserta en el Parque Natural Sintra-Cascais.
Deseos poderosos, chimenea, estacionamiento del sueño en el garaje, los ambientes, la sala con todo el espacio y comodidad que tiene, la diversidad de los baños, la cocina equipada, son algunas de las divisiones que componen esta maravillosa villa. Hay un proverbio escocés que dice que una sonrisa cuesta menos que la luz y da más luz.
Vivir en el cielo y en la inmensidad de esta villa, la calidad de los acabados, la vista que brinda cada nariz, para disfrutar de una hermoso café en la mañana, en el balcón o incluso en el jardín y piensa con una gran sonrisa, el mundo que sueñas y se hace realidad.
Ser feliz es saber que hay lugares que duran para siempre y nunca llegan demasiado tarde.
El poder deleitarse en los momentos de láser y descanso, en el inmenso jardín, en la sala de juegos o en el espejo de agua de la piscina, que se convierte en cascada y degustar unos snacks en una barbacoa al aire libre, son algunos de los placeres de la vida, en esta casa tranquila.
Pedazos de paraíso, ya se los estará imaginando... La magia en el olor a tierra húmeda, el follaje, las flores, las brisas que anuncian la lluvia y el sol.
Las vistas del cielo de las mañanas azules y verdes intensos, destellos especiales, desde lo alto del monte de Sintra ain cordillera.
La Sierra de frondosa vegetación.
Sintra ha sido el lugar elegido para la fijación de varios pueblos que de paso por la Península Ibérica han dejado aquí huellas de su presencia, muchas de las cuales se exponen en el Museo Arqueológico de Odrinhas, cercano.
En el siglo XIX. XII, el 1º Rey de Portugal, D. Afonso Henriques, conquistó el Castillo de los Moros y posteriormente sus sucesores, sobre los restos de un palacio árabe, construyeron aquí su residencia de descanso, el Palacio de la Villa. Todavía quedan muchas reminiscencias árabes, concretamente los azulejos, los patios y las fuentes. Su fisonomía está, sin embargo, marcada por las dos enormes chimeneas cónicas construidas en la Edad Media, hoy ex-libris de Sintra.
Siempre ha sido muy apreciada por reyes y nobles, exaltada por escritores y poetas de la que es un ejemplo ineludible de Lord Byron que lo llamó Glorioso Edén. Sintra cuenta con un rico conjunto de chalets y masías, algunas de las cuales ofrecen actualmente alojamiento en turismo rural o vivienda.
Señalar también palacios como el de Pena, construido en la época del romanticismo en uno de los picos de la Serra, seteais, del siglo. XVIII, hoy convertido en un elegante Hotel, y el hotel Monserrate, famoso por sus hermosos jardines que cuentan con especies exóticas únicas en el país.
Una referencia especial merecen los dulces de Sintra, a saber, las almohadas y las famosas queijadas que, según referencias en documentos antiguos, ya se realizaban en el siglo XIX. xii y formaban parte de la lista de pagos de foros.
En las cercanías, las playas (Maçãs, Grande, Adraga), Cabo da Roca, el punto más occidental del continente europeo, Colares, que da nombre a un demarcado región vinícola, y el pintoresco pueblo de Azenhas do Mar, incrustado en un acantilado.
Ven a conocer y deléitate con este noar.